En el De boca en boca de la semana pasada os hablé acerca de la expresión Ser de sangre azul, y la verdad que vi que os sorprendió el hecho de que antiguamente estuviera mal visto estar morenito de piel y que fuera una costumbre más bien moderna, así que hoy he decidido dedicar esta entrada al origen de
Ponerse moreno
Tal y como os dije en la anterior entrada, hasta que se descubrieron los beneficios de los baños de mar a mediados del siglo XIX, tener la piel morena era símbolo de vida rural y campesina, mientras que la piel blanca mostraba clase y elegancia.
Tal era la obsesión de las damas por tener una piel pálida, que además de utilizar sombrillas y pamelas de ala ancha para evitar esos rayos de sol en sus paseos, también ingerían grandes cantidades de vinagre e incluso se practicaban sangrías terapéuticas, en especial en la época del romanticismo (siglo XVIII).
Sin embargo, todo esto cambió cuando las clases pudientes descubrieron los beneficios de la luz solar y del yodo marino. Fue entonces cuando estar moreno significaba haber pasado una temporada en la playa, y por lo tanto, tener poder económico para costearse esa estancia. Y como todo se pega, las clases medias se apresuraron a imitarlos, por lo que poco a poco las playas se han ido llenando de infinidad de cuerpos expuestos al sol.

¿Sois de poneros al sol?
Nota: Si queréis saber el origen de una expresión, palabra, gesto o costumbre sólo tenéis que ponerla en los comentarios.